Disuelve la grenetina en polvo en agua fría. Mezcla bien y permite que se cuaje.
Coloca el vino tinto en una cacerola pequeña, añade el Azúcar Mascabado Domino®, la piel de la naranja y el jugo de limón. Lleva a hervor a fuego medio bajo, por aproximadamente 10 minutos. Retira del fuego.
Agrega la grenetina endurecida a la mezcla del vino tinto (aún caliente). Mezcla bien hasta que la grenetina se disuelva y no quede ningún grumo. Descarta la piel de naranja.
Añade una pequeña cantidad de la mezcla del vino tinto al molde frío (o moldes) y coloca el molde en el congelador a que cuaje, durante 5 a 8 minutos.
Saca el molde del congelador y arregla por encima de la gelatina cuajada, unas cuantas fresas, moras y zarzamoras. No las encimes unas con otras. Lleva al congelador de 5 a 8 minutos hasta que cuaje nuevamente. Realiza el mismo procedimiento de colocar fruta por encima y añade una pequeña cantidad de gelatina de vino. Coloca nuevamente en el congelador durante 5 a 8 minutos.
Una vez cuajada con toda la fruta, añade la mezcla de gelatina de vino tinto restante por encima. Coloca en refrigeración por lo menos 2 a 3 horas.
Para la gelatina cremosa de queso
Disuelve la grenetina en polvo en agua fría. Mezcla bien y permite que se cuaje.
Coloca en un bowl el queso crema, el Azúcar Mascabado Domino® y la media crema. Bate con una batidora eléctrica hasta que el azúcar se integre bien y la mezcla no tenga grumos de queso crema.
Derrite en el microondas por 20 segundos la grenetina una vez endurecida.
Añade al bowl la leche evaporada y la grenetina derretida. Bate todo hasta que todo esté perfectamente incorporado.
Agrega la gelatina de queso por encima de la gelatina de vino tinto y frutos del bosque.
Refrigera de 3 a 4 horas hasta que todo esté completamente cuajado.
Desmolda con mucho cuidado en una fuente, decora con fruta fresca y hojas de menta ¡y disfruta!